miércoles, 27 de mayo de 2015

EL POST ANTILLANO PR MAYO 2015 -- COLUMNA DE MARIOANTONIO ROSA


Patricia Schaefer Röder: la persuasión minimalista
El Post Antillano — Sábado 23 de Mayo de 2015 00:00
Marioantonio Rosa
Sección: Página 0 - Creativo
 
El término minimal fue utilizado por primera vez por el filósofo británico Richard Wollheim en 1965, para referirse a las pinturas de Ad Reinhardt y a otros objetos de muy alto contenido intelectual, pero de bajo contenido formal o de manufactura, como los «ready-made» de Marcel Duchamp. Ya después se fue haciendo desde esa primerísima partícula de composición de un todo y hacia un todo una genuina entidad de apreciación. en su ámbito más general, se refiere a cualquier cosa que haya sido reducida a lo esencial, despojada de elementos sobrantes. Es una traducción transliteral del inglés minimalist, que significa minimista, o sea, que utiliza lo mínimo (minimal en inglés). Es la tendencia a reducir a lo esencial. Se aplica también a los grupos o individuos que practican el ascetismo y que reducen sus pertenencias físicas y necesidades al mínimo, es también el significado a simplificar todo a lo mínimo. Y si tenemos esa visión tan esencial de un concepto que parte de lo mínimo hacia un universo en significado y forma, entonces estamos frente a un evento que debemos detenernos a contemplar y si hay poesía la persuasión es definitiva. Siempre he definido la persuasión en poesía y en las artes como una invitación al acto de la expresión en gran legitimidad y en ausencia de estructuras o nombres, si bien, las técnicas.
 
Aparte de la etimología del concepto “minimalista” quiero figurarme esa “reducción” a la forma que encierra en este caso un poema como un desprendimiento capaz de conmover en mensaje y continuidad.
 
Es decir que el poeta en su verdad, conduce y transforma el orden establecido por la misma poesía; de él, un cauce transfigura la letra escrita, inconfundible y expresada. No daría este escrito para nombres y causantes de nueva poesía.
 
Entonces hablamos de Patricia Schaefer Roder dentro de esa misma premisa. Hay un evento provocador: su nuevo libro Siglema 575, a lo que añado, una nueva audacia de remover órdenes y pautas y decirnos que la imaginación no elige un canal, un trance, una brújula cerca o la conmemoración de un mapa. Hablemos pues de una trayectoria en diferencia y en verdad transformadora hace brillar la siempre inconclusa acústica donde vive de su sonido, la creación:
 
1. La fuerza de escribir. Háblame de tus comienzos, autores provocadores, tus primeros poemas o los primeros párrafos rumbo a tu identidad como escritora.
“Una de mis más grandes pasiones es escribir. Debo haberlo heredado de mi padre, que disfrutaba tanto la lectura como la escritura. Claro, teniendo una familia de cuatro hijos que hacían mucho ruido todo el tiempo, todos los días, a mi padre no se le hacía nada fácil concentrarse en sus textos. Sin embargo, dejó varios ensayos, poemas y cuentos interesantes, así como su autobiografía y un libro traducido del español al alemán. Siendo hijos de una pareja alemana que emigró a Venezuela a mediados del siglo pasado, mis padres nos animaban a mis hermanos y a mí, a escribirles cartas (en alemán) a la familia que quedaba en Alemania. Definitivamente fue un ejercicio excelente de creatividad, idiomas y de cierta manera, incluso de interpretación”.
 
2. Escoges el siglema como manifiesto poético. ¿Es el siglema una vanguardia? ¿Soluciona la búsqueda de novedad?
“Para mí, desarrollar el siglema ha sido la siguiente etapa natural en mi crecimiento como escritora. Si bien se dice que los escritores deben ser innovadores, en principio no fue esa la intención consciente de mi propuesta. El siglema no fue para nada concebido como un artilugio novedoso de la lírica; más bien es una respuesta más clara al mundo que nos rodea. Las generaciones actuales vienen enfocándose cada vez más en la esencia de las cosas, lo importante, lo genuino, lo puro. En ese sentido, podría considerarse el siglema como un movimiento de vanguardia dentro de la poesía; una nueva manera de escribir poesía minimalista que se basa en la máxima de que “todo se originó de un punto y todo puede reducirse a un punto”.
 
3. ¿Cómo ves el propósito de lo que debe hacer la poesía en una sociedad moderna, deshabilitada y sin íconos reformadores?
“La poesía es el canto del alma. Siempre lo ha sido y siempre lo será. Si bien la exploración del universo y las emociones desde el alma ha ido desdoblándose a lo largo de la historia, enfocándose en la búsqueda de las diferentes verdades de cada era, las personas que conforman la sociedad moderna son seres humanos como los que hubo antes y los que habrá en el futuro. En la actualidad, los íconos han sido sustituidos por un movimiento inmenso de personas comunes que busca llegar al corazón de todo; definiendo, comprendiendo, profundizando y abrazando la diversidad de aquello que les importa. Es allí donde la poesía actúa, una vez más, como agente catalizador de esta eterna búsqueda del alma”.
 
4. Siglema 575. Temas, búsquedas o laberintos. Háblanos de tu libro.
La versatilidad del siglema nos permite abordar cualquier tema que nos mueva en el estilo que cada poeta desee usar. Así, mi libro tiene cinco secciones: Sobre la poesía, A la familia, La esencia femenina, Cosas del alma y Pasiones. A lo largo de mi vida, el tema de la mujer ha sido una constante que se ha reflejado en todos mis proyectos, así como la relación de la mujer con el alma, la pasión que la hace respirar y su personificación en la luna. Siglema 575: poesía minimalista es una obra muy íntima que transita distintas veredas en la exploración de mi propia esencia y del mundo en que habito.

Un siglema 575 es un poema que se escribe en base a las letras de la palabra o palabras que definen su tema y que constituyen su título. El tema es libre y las palabras que lo definen forman el título, el cual queda representado como una especie de acrónimo, con las siglas separadas entre ellas por un espacio. Cada estrofa posee tres versos, de los cuales la primera palabra del primero debe comenzar con la letra correspondiente a la sigla que le toca. La métrica es 5-7-5, con rima libre. Por su naturaleza acrónima, las estrofas deben poder funcionar independientemente como un poema autónomo, y en conjunto, como parte de un poema de varias estrofas que gire alrededor del mismo tema. En un siglema 575 hay tantas estrofas como letras posea el título.

Nuestras letras viven ceñidas a estas propuestas como Siglema 575 de Patricia Schaefer Roder donde la novedad nos da el escenario exacto de lo que debe ser la poesía; una libertad de verbo y forma, una constancia de identidad, un discurso de cambio y revolución, y desde ahí la magnitud, la plenitud, la excelencia.

Saludamos este libro en todas su expresiones, en esa persuasión que nos hace regresar al punto, y creer en él. No podría escribir otro cierre que no fuera este poema:

Por este verbo
que nutre mi espíritu
escribo siempre.
 
Alas del alma
Tantas ideas libres
Vuelan en alto.
 
Lejos, muy lejos
Puedo soñar contigo
Palabra adentro.
 
Abre las letras
Secretos escondidos
En el corazón…
 
Arriba, vida
Hazme respirar hondo
Lápiz en mano.
 
Solas, nosotras
Debemos descubrirnos
Para existir…
 
(P A L A B R A S)

viernes, 8 de mayo de 2015

LA VOZ HISPANA NY MAYO 2015 -- COLUMNA DE ZENN RAMOS


Escribo, vivo
late más mi corazón
pluma en mano.

-Patricia Schaefer Röder

Entre las numerosas estéticas que pulularon por décadas en la literatura, se destacó una forma de mirar el mundo que hacia énfasis en lo menor, lo mínimo. Los minimalistas, que así se hicieron llamar e incluso los denominaron de ese modo los tratadistas, apostaron a una poesía que rescataba todo aquello que hasta entonces parecía destinado a no ingresar nunca al ámbito de la poesía. El minimalismo, en cuanto a la forma, estructuró versos breves y poemas también breves, e incorporó temáticas y elementos insignificantes para otras poéticas. Así, por ejemplo, antes que escribir sobre el amor o la muerte, preferían poetizar sobre los celos o la angustia del cuerpo. En lugar de cantar al Universo, se exaltaban las luces de los planetas deshabitados; la fe y la esperanza se reducían, y el auge se estacionaba en la razón y la inquietud. Las situaciones triviales eran elegidas, como una forma radical de reducir la expresión poética. Esta semana quiero hablarles sobre una Escritora y traductora literaria venezolana que, dentro de sus propuestas, separa un espacio para exaltar lo mínimo y brindar a otros el reto de tematizar dentro de una lírica reducida: Patricia Schaefer Röder. Patricia nació en Caracas, Venezuela, donde se crió. Allí obtuvo la Licenciatura en Biología y publicó sus primeros ensayos. Vivió en Heidelberg, Alemania y en Nueva York, EEUU, donde retomó el oficio de escribir y se dedicó a la traducción y las artes editoriales. Desde el año 2004 vive en Puerto Rico, dirigiendo su propia empresa de traducción y producción editorial. Los escritos de Patricia han sido merecedores de premios nacionales e internacionales, apareciendo publicados en diversos medios, incluyendo la reciente antología Fronteras de lo imposible del Certamen Casa de los Poetas 2014, de Puerto Rico. En 2011 recibió el Primer Premio en narrativa del XX Concurso Literario del Instituto de Cultura Peruana en la ciudad de Miami en Florida, Estados Unidos, con su cuento “Ignacio”. Su antología de relatos cortos Yara y otras historias fue publicada en 2010 por Ediciones Scriba NYC, que en 2014 también publicó su primer poemario Siglema 575: poesía minimalista. Entre sus traducciones literarias destaca la novela El sendero encarnado (The Reddening Path) de Amanda Hale, publicada en 2008 por Verdecielo Ediciones. Siglema 575 es una nueva forma de escribir poesía. Con esta original propuesta, Patricia Schaefer Röder nos lleva a descubrir la esencia de aquello que nos inspira. En ningún momento nos obliga a seguir un estilo poético particular; al contrario, el siglema 575 nos anima a vivir nuestra libertad creadora. Infinitamente versátil, a través del siglema 575 podemos abordar todos los temas que nos mueven de la misma manera en que se gestan, ya sea con metáforas barrocas o con imágenes más elegantes o sencillas, sin acercarnos a los rumbos de la simplicidad, y sin embargo regresando a la naturaleza del tema. Sublime y limpio, con su métrica breve, junto con la rima libre, nos deja redefinir nuestra visión de las cosas, concretando figuras que nos llevan directo al grano, siguiendo la tendencia de nuestro tiempo hacia lo puro, el corazón de lo que nos importa, explorando, definiendo y profundizando en cualquier sentimiento, personaje u objeto. Así, el siglema 575 es la bella personificación de la poesía minimalista, “porque todo se originó de un punto, y todo puede reducirse a un punto”.

S O Y
Siento y existo
mi mente se levanta
de las cenizas.

Otra no seré
máscaras y etiquetas
presta destruiré.

Ya habita mi alma
el éter más brillante
del tiempo sin fin.

Derechos Reservados
Patricia Schaefer Röder ©2015 PSR